Lave siempre cuidadosamente sus manos antes de preparar el biberón.
Lave y esterilice el biberón, la tetina y todos los utensilios a utilizar.
Hierva agua potable durante 5 minutos y deje enfriar hasta 40ºC o caliente agua mineral embotellada con bajo contenido mineral hasta 40ºC.
Vierta primero en el biberón o en la taza la cantidad de agua hervida necesaria.
Usando solo la cuchara-medida incluida en la lata, agregue el número correcto de cucharadas de polvo, alisando la cuchara con un cuchillo limpio y seco; no apriete el polvo.
Tape el biberón utilizando la tapa de plástico rígido, agite bien hasta que todo el polvo se disuelva por completo y no queden grumos o mezcle muy bien el contenido del polvo en la taza hasta su completa disolución.
Retire la tapa y coloque una tetina esterilizada en el biberón.
Deje enfriar hasta que esté tibio (37ºC).
Pruebe la temperatura vertiendo unas gotas en su muñeca.
Dele inmediatamente la leche preparada a su hijo.
Deseche la cantidad de leche restante.